Buenas tardes a todos y a todas. Muchas gracias por venir de todos los rincones de nuestra extensa Provincia. Hoy acabamos de hacer una firma. Estamos presentes las autoridades provinciales, 90 intendentes de la provincia de Buenos Aires, una provincia que por su magnitud y por su importancia, es la que más está sufriendo los efectos de la política económica nacional.
Hemos sufrido la pérdida de recaudación que tiene que ver con la crisis autogenerada, con una crisis que quiero decirle —para que quede muy claro— a las autoridades nacionales, que representa un sacrificio inútil. Hoy estamos inmersos en esta situación que involucra, como ustedes saben, una caída de la actividad, una caída del comercio, una gran caída de la industria, de la producción en todas sus formas por tanto del empleo, del consumo. La verdad es que estamos viendo números de catástrofe.
A mí me tocó, durante mucho tiempo, dedicarme a hablar de la historia económica argentina y la verdad es que para encontrar situaciones así hay que ir a las más grandes crisis, a la pandemia, a fenómenos absolutamente excepcionales, pero nunca se había visto —aún en experimentos neoliberales— resultados tan violentamente desastrosos como lo que estamos viendo. Una política que, por un lado, genera pérdida de recaudación de cada uno de los gobiernos municipales y del Gobierno provincial, por la caída de la actividad. Esto es normal: hay una relación clara y directa entre la recaudación provincial y las tasas municipales, y lo que ocurre con la sociedad, pero sobre eso se monta una política difícil de describir, si no fuera porque el propio presidente de la Nación la anunció, que es la de fundir a las provincias.
Dijo que iban a fundir, a asfixiar a las provincias argentinas, a todas y, como siempre, especialmente a la provincia de Buenos Aires por la proporción que representa en los recursos nacionales. Es decir que no pagando recursos adeudados a la provincia de Buenos Aires se produce, de por sí, un ahorro significativo. Por eso y por cuestiones políticas de las que ya hemos hablado, del propio presidente de la Nación, decisiones que ha expresado, estamos sufriendo también una injusta e ilegal pérdida de recursos. Todos los que estamos acá que tenemos responsabilidades de gobierno, vemos que acompañada de esta pérdida de recursos viene una demanda y una necesidad cada vez mayor en toda la provincia de Buenos Aires.
Lo he hablado con muchos de ustedes en las últimas recorridas; lo hacemos habitualmente a través del fluido contacto que tienen con los ministros y las ministras de cada una de las áreas, y también conmigo. Ha crecido multiplicándose la demanda de alimentos de una forma realmente terrorífica, porque se duplicó, triplicó. El otro día el intendente de Tandil decía que se quintuplicó la demanda de alimentos en su municipio. Y al mismo tiempo crece la demanda de prestaciones y servicios de salud, de medicamentos, crece la demanda para la educación pública en su modalidad gratuita, porque aquí hay educación pública subsidiada de gestión privada, privada-privada y pública-gratuita. Bueno, la gratuita está encontrando un aumento en la inscripción de aquellos que ya no tienen posibilidad de pagar la cuota, aún cuotas subsidiadas, y que siempre habían podido afrontar.
Y la última, que es moneda corriente en toda la provincia de Buenos Aires, si no quiere escuchar el Gobierno nacional que se tape los oídos, pero la realidad va a perforar todo tipo de barrera y todo tipo de contención para no ver lo que está ocurriendo. Lo que está ocurriendo es que tenemos una fuerte demanda de trabajo en todos los municipios de la provincia de Buenos Aires, hablaba con el intendente de San Vicente, me decía que de cada 20 reuniones, de cada 20 encuentros que tiene con los vecinos, 14 son pedidos de trabajo.
Nadie dice que no hubiera previo al cambio de gobierno, a la asunción del Milei, demanda de alimentos, de salud, de trabajo; la había, pero ha sido explosivo el deterioro de las condiciones sociales, económicas y, por tanto, de la convivencia en toda nuestra provincia de Buenos Aires, que representa 40 por ciento del país. Es decir, sufrimos caída de los recursos y cada vez más necesidades que afrontar y atender. Y nosotros no podemos andar viajando a dar conferencias, o juntarnos con políticos extranjeros durante días y días. Nosotros estamos, los intendentes y las intendentas están,, el Gobierno provincial está al pie del cañón atendiendo las necesidades generadas por la crisis de Milei.
Ahora se suma el aumento desmedido del transporte. Hemos hablado con el intendente de La Plata, y con varios de ustedes, acerca de que hay gente que ya no va a trabajar porque no le resulta rentable con los costos del boleto. Estamos en esa situación. Tal vez de una manera dolorosa muchos están comprendiendo que el boleto subsidiado, con asistencia pública, era una forma de salario indirecto; que era una forma de complementar, como con las tarifas, los salarios de los trabajadores y las trabajadoras. Y hoy se enteran también algunos, que lo querían negar o que no querían reconocerlo, o que hasta que estaban en contra, que desde el sector privado les piden más viáticos, le piden al empleador pagar el boleto, con lo cual genera un costo adicional que va al proceso productivo y a los procesos de trabajo.
Sobre esta situación difícil de por sí, se da una política económica que genera desempleo y genera desindustrialización, que ataca a la producción en todas sus formas y a las condiciones sociales. Sobre eso, quiero enumerar —porque estamos acá los que tenemos, a través de nuestras funciones de gobierno, que responder a cada vez más necesidades y desesperación— y compartir cuáles son las deudas que tiene el Gobierno nacional con la provincia de Buenos Aires. Estas deudas son al mes de mayo, es decir, que esto se va actualizando porque son deudas que corren a medida que hay que ir haciendo los desembolsos.
La compensación del Consenso Fiscal, un monto adeudado de 499.000 millones de pesos, casi medio millón de millones de pesos.
El Fondo del Conurbano Bonaerense, que fue parte también de varios consensos sucesivos; esto es ley, esto está reconocido por el Congreso, está firmado por todas las partes, lo han dejado de pagar: 76.000 millones de pesos.
El Fondo de Fortalecimiento Fiscal, que lleva un nombre parecido al que estamos honrando, es un fondo que tenía como objetivo directo fortalecer la seguridad en la provincia de Buenos Aires. Cuando llegamos había 790 móviles, vehículos, patrulleros, hoy tenemos más de 5.500 patrulleros en la provincia de Buenos Aires. Una inversión sin precedente, aumentamos la cantidad de agentes, aumentamos, también, los instrumentos de trabajo de la Policía, mejoramos la capacitación, la tecnología, y en buena medida con el Fondo de Fortalecimiento que cortó Milei. Hasta el mes de mayo, acumulaba una deuda de 387.000 millones de pesos.
Las transferencias a los jubilados y a las jubiladas de la Provincia. El Gobierno nacional, con muchas provincias, porque varios de estos conceptos abarcan a otras provincias también, tiene una situación de deuda, que luego la presentan como el éxito del ajuste: desfinanciar a las provincias y, por tanto, en este caso, a la seguridad, a los jubilados y a las jubiladas, la transferencia del ANSES o a la caja provincial. Hay provincias que no transfirieron su caja al Gobierno nacional, es decir, que todavía tienen caja de jubilación, recuerdo a Santa Fe o Córdoba, además de la provincia de Buenos Aires. Hay un compromiso del Gobierno nacional que es legal, es la Ley 27260 por la cual tiene que compensar a estas provincias por hacerse cargo íntegramente de las jubilaciones, es la diferencia con lo que pagan y lo que debería pagar ANSES. Así que esto tampoco lo está cumpliendo, por un monto a mayo de 810.000 millones de pesos.
Y, luego, un convenio especial, que tiene que ver con las cárceles de la provincia de Buenos Aires, el Fondo de Infraestructura Penitenciaria. Una deuda de 15.000 millones de pesos, 10 obras paradas, entre alcaidías y nuevas cárceles, por culpa del no pago de este Convenio.
Esto totaliza 1.800.000 millones que le deben de forma directa al Gobierno provincial, entre fondos y transferencias financieras. Y por lo tanto, a los 135 municipios y a sus 17 millones de habitantes.
Hemos reclamado cuatro conceptos a la Corte Suprema de Justicia pero, reitero, esta es una deuda que está documentada, que es legal, es un incumplimiento y es un abandono al pueblo de la provincia de Buenos Aires que está privado de aquello que tiene que ver con la seguridad, con las nuevas cárceles, con fondos educativos, de transporte. Y esto sin contar una deuda inmensa en las obras que interrumpió, que no son recursos financieros, pero son obras interrumpidas por aproximadamente 4 mil millones y medio de pesos, aproximadamente. Eso se actualiza diariamente porque tiene que ver con el ajuste de los costos de las obras. Es decir que estamos hablando en mayo de 6.300.000 millones de pesos de deuda del Gobierno nacional.
Hay un homónimo, algo que lleva el mismo nombre prácticamente que el Fondo del Fortalecimiento, que se decidió también por ley, como había pasado con el fondo provincial, un Fondo de Fortalecimiento a la Provincia, también verificado en el Congreso de la Nación, que dejó de pagar Milei ilegalmente. De la misma forma, nosotros tenemos un compromiso sellado en la Legislatura provincial el año pasado, antes de que se conocieran las medidas de Milei y sus resultados; es decir, en otras circunstancias. Un Fondo de Fortalecimiento para los municipios de la provincia de Buenos Aires. Ese Fondo de Fortalecimiento Municipal es un fondo que estaba distribuido en diferentes cuotas. Hoy toca la tercera cuota, que corresponde a un 30 por ciento del Fondo de Fortalecimiento Municipal, por un monto de 38.000 millones de pesos y que se suma al 40 por ciento que ha sido cumplido en las cuotas anteriores.
Así que lo digo con claridad: hay dificultades, hay crisis económica, estamos sometidos a un proceso de discriminación e intento de asfixia, pero la provincia de Buenos Aires cumple el compromiso que le corresponde, porque sabemos que así como las provincias colaboran con la política nacional, son los intendentes y las intendentas de la Provincia los que están atendiendo hoy buena parte de la crisis generada por Milei, y quienes reciben a los caídos de este sistema económico cruel.
Y, por tanto, creo que es un acto que tiene dos elementos: por un lado, cumplir, por el otro, reclamar lo que le corresponde a la provincia de Buenos Aires. Así que yo agradezco el apoyo de los 135 intendentes e intendentas de la Provincia en el reclamo al Gobierno nacional que se ha llevado adelante para recuperar los fondos que legalmente le corresponden a Buenos Aires. Muchas gracias por esto.
Han interrumpido todas las obras, pero hoy la verdad que ha sido una ocasión para encontrarnos, juntarnos, compartir y donde hemos tenido una gran realización. Ustedes saben que se pararon 1.000 obras nacionales en todos los distritos. Las obras provinciales, el ministro Katopodis con un gran esfuerzo las está poniendo en marcha; a veces implican costosas, arduas renegociaciones, redeterminaciones, todo lo que se deriva de la enorme devaluación que generó el Gobierno [nacional].
Estamos poniendo en marcha todas las obras en la Provincia. En Tandil, estuvimos inaugurando un edificio inmenso para un Instituto de Formación Cultural, de 28 aulas. Así que educación, sistema educativo bonaerense y cultura. La Provincia de Buenos Aires no para. No puede parar porque es nuestro compromiso seguir invirtiendo en infraestructura educativa.
Después estuvimos en Luján inaugurando el Jardín Maternal N°1, y visitando las obras que tienen que ver con la Cuenca del Río Luján. Estuvimos, solamente en los últimos días, en Presidente Perón, inaugurando dos bases para la Policía de la Provincia de Buenos Aires, entregando ambulancias, patrulleros, motos. Estuvimos en Villa Gesell, inaugurando un Centro de Atención de la Salud. En Lezama, municipio también de la oposición, inaugurando otro Centro de Atención Primaria de la Salud, 500 metros cuadrados, 6 consultorios. Ya son 167 los Centros de Atención Primaria de la Salud y 227 escuelas en la provincia de Buenos Aires.
Y estuvimos hoy inaugurando un Centro de Desarrollo Infantil, un Centro para la Primera Infancia en Exaltación de la Cruz. Quiero contar muy brevemente de qué se trata porque es un hito importante de nuestra tarea en esta época, en esta etapa. Hay en construcción, con financiamiento original del Gobierno nacional, 85 Centros de Primera Infancia en el territorio de la provincia de Buenos Aires. Esos centros, como toda la obra pública nacional, fueron detenidos, fueron parados, fueron suspendidas las obras, y hoy tenemos recorriendo toda la provincia esos carteles que anuncian obra nacional, muchas de ellas, con una indicación de que la obra fue parada y desfinanciada por el gobierno de Milei.
Pero nosotros tomamos un compromiso, que creo que hoy, en la visita y en la inauguración, la verdad es que comprendí la profundidad y la importancia que tienen. Uno de esos centros para la primera infancia, lleva ya, en los primeros días, 30 inscriptos. Son niños, niñas y sus familias que no tienen, no pueden acceder al privado, ni a esas tareas de cuidado, tan inequitativamente distribuidas entre los géneros, y que caen mayormente en las mujeres, en las madres, en una abuela o en la tía. Y hoy veíamos como los nenes y las nenas de allí, de la zona, del barrio, estaban felices conociendo a sus nuevas maestras, pero veíamos también a su familias viendo que el Estado iba a poder hacer eso, que no es que no exista en lo privado, no es que el mercado no lo resuelva, lo que pasa es que lo resuelve para muy poquitos y a la gran mayoría los deja afuera.
Así que hoy llevamos adelante un acto de justicia, de justicia social, pero es más un acto que tiene mucho que ver con lo que pensamos, porque en nuestro gobierno hay unos solos privilegiados, unos únicos privilegiados, y son los niños y las niñas de la provincia de Buenos Aires, que se alimentan muchos de ellos en nuestras escuelas, con el Servicio Alimentario Escolar, 2.500.000 aproximadamente. Esta es una obra especial porque tenemos 85 paradas por el Gobierno nacional, y hoy inauguramos la primera que se termina con fondos de la Provincia de Buenos Aires.
Continuar nuestra obra en algunos casos, en la medida de lo posible, es asumir, compensar y sustituir a un gobierno desertor, que abandona a la Provincia, que abandona a su pueblo, que abandona a las familias, que abandona a los niños y a las niñas. Lo hemos hecho también con los medicamentos para la atención del cáncer, que se interrumpieron a nivel nacional, y ampliamos el vademécum. El otro día veía a una señora, ustedes saben que no nos gusta dar con estos golpes bajos, que había perdido sus medicamentos, y se los devolvió la Provincia de Buenos Aires. Dejó de pagar Nación, se lo devolvió el Estado de la Provincia de Buenos Aires. Y no tenía forma de comprar medicamentos de un millón, dos millones de pesos, así que estaba condenada realmente a no tenerlos.
Así que estamos continuando, nuestro compromiso es que en los Centros de Primera Infancia, en los CDI que dejó abandonados el Gobierno nacional, sucedan dos cosas. Por un lado, concluirlos desde el Ministerio de Infraestructura. Y por otro, asumirlos desde el Ministerio de Desarrollo de la Comunidad como UDI de la Provincia de Buenos Aires, para que entren dentro de los 1.600 Centros para la Infancia que tenemos en la Provincia. Hoy inauguramos el primero, mañana se inaugura el segundo en Pehuajó, Pablo Zurro. Los primeros 5 de los 85 ya están para inaugurar y vamos a continuar los otros, como vamos a continuar con las obras en universidades nacionales que también abandonó e interrumpió el Gobierno nacional, llevando prácticamente al quiebre del sistema universitario.
Por supuesto que es una situación donde a nosotros nos honra cumplir con los compromisos, es una tarea que algunos me decían “es un milagro”, otro me dijo “el ministro es mago”. Bueno, ya saben que estas cosas no son magia, sino que, en este caso, es esfuerzo, es eficacia, pero es sensibilidad con el pueblo de la provincia. Contra la crueldad, acompañar, proteger, un escudo contra estas políticas.
Hoy también anunciamos que vamos a crear una Unidad Provincial para que las Abuelas de Plaza de Mayo puedan continuar, en la medida de lo posible, con la búsqueda de los nietos y las nietas. Son 300 nietos y nietas: la mitad, aproximadamente, bonaerenses.
En tiempos donde algunos visitan a represores, como si fuera un acto humanitario, nosotros pedimos, por supuesto, que esto se resuelva como corresponde: en paz, acompañando a las víctimas, buscando a los hijos, a las hijas y a los nietos y a las nietas de los desaparecidos, y que se resuelva, reafirmando desde la Provincia de Buenos Aires que fueron 30.000. Memoria, verdad y justicia.
Muchísimas gracias. Lo hemos hecho bastante rápido; agradezco también porque es importante mostrar el esfuerzo que se está haciendo ante tanta adversidad y es importante mostrar que hace falta un Estado presente, un Estado transparente, un Estado eficaz, pero sobre todo un Estado más humano. Muchas gracias.