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Enviamos al Papa Francisco una pelota confeccionada por internos de la cárcel de Trenque Lauquen

En la Plaza de San Pedro, en la Ciudad del Vaticano, el Papa Francisco recibió una pelota con los colores de San Lorenzo, íntegramente realizada por internos de la Unidad 20 Trenque Lauquen

Miércoles 9 de Octubre 2019
Enviamos al Papa Francisco una pelota confeccionada por internos de la cárcel de Trenque Lauquen

del Servicio Penitenciario Bonaerense, que trabajan en la fábrica “El Pase”.

La pelota, diseñada y producida por privados de libertad con salidas laborales, se la enviamos al Sumo Pontífice a través de Marcin Schmidt, miembro de la Orden de Malta y presidente de Cáritas de Polonia, quien la recibió en agosto pasado de manos del párroco de la diócesis vecina de 9 de Julio, Guillermo Gómez.

Gómez recibió la visita de Schmidt, un religioso muy cercano al Papa, y en una de las jornadas, el local le contó al sacerdote polaco sobre la importante tarea social que realiza “El Pase” con los internos de la cárcel de Trenque Lauquen que están próximos a obtener la libertad.

Ni bien Schmidt se enteró de la existencia del emprendimiento, quiso conocer las instalaciones de “El Pase”, coordinada por Martín Herrero, miembro de la Pastoral Carcelaria.

Juan Ballester, uno de los internos que participó en la confección, aseguró: “El trabajo y la participación en el equipo de rugby de la Unidad 20 ‘Los Bravos de Pincén’ me abrieron una puerta para estudiar el profesorado en Educación Especial con Orientación a Discapacidad Intelectual”. Y, además, escribió: “En la fábrica de pelotas 'El Pase' nos ayudan cada día a dejar atrás las malas costumbres, a ser más eficientes y a prepararnos para el egreso final de la pena”.

Este tipo de iniciativas las impulsamos desde el Ministerio de Justicia de la provincia de Buenos Aires. El ministri, Gustavo Ferrari, destacó que “preparar a los internos con oficios para que cuando salgan tengan oportunidades de trabajo es uno de los ejes que nos indicó la gobernadora María Eugenia Vidal, y esta experiencia de producción de pelotas es una muestra de que éste es el camino”.

Actualmente, “El Pase” se encuentra a punto de convertirse oficialmente en una cooperativa con personería jurídica, con una comisión compuesta por ocho personas. En la fábrica trabajan cuatro internos, y Jonathan, un ex privado de libertad que tiene a cargo a diez jóvenes en situación de vulnerabilidad.