Dinámica, extrovertida polémica. Así es la directora ejecutiva de ProyectAR, ONG conformada por más de 90 empresas interesadas por una gestión de Responsabilidad Social Empresaria (RSE), que vincule sus tareas con el cuidado del medio ambiente.
Carolina estudió Relaciones Gubernamentales y es traductora de inglés, y en lo personal impulsa ideas y proyectos concretos con impactos positivos en Proyectar y a través de ella en la cuenca del Reconquista. En ese sentido asocia fuertemente el significado del río con "su limpieza, elevar conciencias, ayudar al prójimo y trabajar en una construcción colectiva. Significa ayudar a lograr que las personas sonrían".
Esta ONG nace como un factor de influencia con un amplio espíritu colaborativo y solidario, transformador de buenas ideas en acciones concretas. Manejan una red de vinculación importante armando equipos para cada proyecto. Para quienes integran la ONG, existe un problema muy serio de contaminación, por lo que el saneamiento del Río Reconquista es primordial.
Carolina asegura que el tema del agua es vital y explica que: “Las primeras formas de vida surgieron en el agua, antes que el oxígeno inclusive. Para mí es importante sanear la Cuenca por mis hijos y por todos a quienes les estamos devolviendo este mundo que nos prestaron”.
En ese sentido, ¿cómo evaluás su saneamiento?
Es completamente posible si uno sabe que imposible es “tocar el sol”, pero sanear una Cuenca es complejo por la cantidad de aristas que hay que ocuparse de manera planificada y metódica y todo dentro de una construcción colectiva. Pero durante décadas, lo que ocurrió con la Cuenca es una simple expresión de lo que somos como personas y como seres humanos, la educación es primordial en este tipo de saneamiento amén del trabajo que deben realizar las autoridades.
¿Cómo surge Proyectar, qué objetivos persigue y con qué equipo cuenta la ONG?
Dada mi experiencia en el mundo corporativo, junto a Eduardo Regondi, presidente de ProyectAR Tigre y un grupo de empresarios, nos dimos cuenta que las empresas quieren realizar trabajo de responsabilidad corporativa pero que no siempre tienen el expertise necesario, ni el tiempo y en algunos casos no lo consideran su objetivo primordial.
Por ello creemos que un trabajo de coordinación y Networking de la labor corporativa de RSE, que ya hacen las compañías en forma individual, y que podrían agregar un valor importante y una dimensión al trabajo que de otra manera no tendría. De esta forma logramos acompañar y ayudar positivamente a las empresas en su labor de ayuda hacia la Comunidad y Medioambiente.
Dentro de Proyectar, qué lugar ocupa la cuenca del Reconquista?
El saneamiento del Río Reconquista es nuestro primer gran proyecto para luego seguir saneando aguas de otros ríos comunitarios. Por ese motivo, comenzamos a realizar trabajos de investigación a través del COMIREC -ocupando un lugar representativo-; también con la Defensoría del Pueblo; la municipalidad de Tigre; el Consejo Económico y Social de Tigre. Junto a especialistas se está desarrollando un manual de acciones tanto públicas como privadas para presentar ante el OPDS y ser nosotros los operadores y supervisores de dichas acciones.
¿De qué modo se involucran los empresarios?
Es interesante remarcar que muchos de ellos están involucrados, en un momento de sus vidas que sienten el deber de devolverle algo a la sociedad respecto al Medio Ambiente. Empezar a agradecer, cada uno desde su lugar y desde sus recursos algo de lo que aprendieron del desarrollo de sus negocios. Entonces encontraron en este espacio de ProyectAR que pueden dejar fluir sus ideas, sus recursos, sus acciones concretas. A partir de allí comenzamos a trabajar otros proyectos como en el caso de Banco de Bosques y la ONG Árbol.
Para ProyectAR, ¿qué ejes de trabajo son prioritarios?
Los prioritarios son educativos, de limpieza, de RSE, nuestro proyecto de Bahía Verde en Nordelta (proyecto de sustentabilidad empezando por el reciclado) y de Barrio Limpio (actualmente hay 437 villas y asentamientos precarios en toda la Cuenca que no tienen recolección de basura y este programa pretende ser la solución a este inconveniente). Los programas educativos son a largo plazo y en escuelas de bajos recursos y se basa en la “gota que orada la piedra”.
¿Cuáles han sido los resultados?
Pero para ver resultados podemos mencionar que hemos dado talleres y conferencias en muchísimas universidades y escuelas. Hemos plantado árboles, participado de diferentes talleres educativos, stands, etc. Muchos alumnos de diferentes entidades educativas nos convocan para realizar sus tesis para recibirse.
Realizamos actualmente mucho trabajo de investigación que nos permite diseñar luego lo que llevamos a la práctica.
Sobre la Educación, ¿cómo lo abordan y cómo creen que debería abordarse por el Estado?
La educación la abordamos desde la empatía, si uno logra ser empático con el alumno aprende mejor y más rápido. Y por parte del Estado creo que deberían volcarse a todas las fundaciones y ONG ́s que ya están operando en diferentes áreas y potenciarlas con programas a largo plazo y logrando que sea educación oficial. Al no ser la educación ambiental oficial muchas veces es complicado generar una agenda de trabajo que esté a la altura de las circunstancias.
¿Qué reflexión surge de la experiencia con el COMIREC?
Mi experiencia con el COMIREC siempre fue muy colaborativa y generosa y las personas con las que traté siempre fueron muy amenas, pero tal vez mi ansiedad me lleve a querer ver resultados en el corto plazo mientras se planifica el mediano y largo plazo.