La iniciativa forma parte del programa del Ministerio de Justicia que une dos ejes de gestión: la capacitación laboral y el servicio a la comunidad.

Tras el pedido de la institución educativa a la que asisten 279 niños, 15 privados de libertad que se capacitan y trabajan en el taller de carpintería del penal de Las Tunas, a cargo de Santiago Maffía, docente del Centro de Formación Profesional, y del colaborador externo Gustavo Herrero, pusieron la mano de obra para cumplir con el requerimiento.

Además, Martín, uno de los detenidos , experto en la materia, se encargó de tornear las luces y de darle curvatura al capó, entre otros detalles.

“Utilizamos pallets que aportó la firma ‘La Serenísima’ y para que pareciera a un jeep verdadero conseguimos cubiertas, un velocímetro, un interruptor de encendido y un volante. Algunos internos desarmaron los pallets, otros cepillaron y lijaron la madera, y entre cinco, lo ensamblaron. Luego, tres lo pintaron. Resumiendo, esto fue obra de ellos”, contó Maffía.

Los niños del jardín recibieron con mucha alegría el nuevo vehículo. Cabe mencionar, que en agosto el penal de Trenque Lauquen donó un tren a la misma institución.

El director de la Unidad 20, Mario Clementi, resaltó la importancia de trabajar para la comunidad y agradeció la colaboración de quienes se involucran en el proyecto.

En tanto, Marcela Olguín, la directora del Jardín de Infantes “Corazón”, se mostró sorprendida con el vehículo de madera entregado, destacó la pronta respuesta del Servicio Penitenciario Bonaerense y dijo: “Nosotros habíamos mandado a pedir un jeep chiquito, estilo pata - pata. Realmente, no esperábamos recibir esto. Quedó súper hermoso, los chicos estaban enloquecidos y, cuando lo vieron los padres, se quedaron encantados”.