El Departamento de Zoonosis Urbanas junto a la Residencia de Veterinaria en Zoonosis y Salud Pública del Ministerio de Salud, llevó adelante una jornada sobre rabia en la Escuela Primaria N° 32 “José Manuel Estrada” de la ciudad de Cañuelas, el viernes pasado.
Con gran convocatoria, la charla estuvo dirigida a alumnos de primer a sexto año de primaria, padres, docentes y autoridades. La iniciativa de la jornada tuvo su origen en la aparición de murciélagos en la zona, aunque ninguno con diagnóstico positivo, según informaron los especialistas.
Entre los temas abordados, la Dra. Florencia Pastorino, jefa de residentes, explicó a los presentes cómo actuar ante la aparición de murciélagos caídos. En caso de ser un menor quien detecte el ejemplar, sea en el colegio o en el domicilio, no tiene que tocarlo, aunque parezca muerto, y debe dar aviso a un adulto. “Si fuera en el colegio, el cuerpo docente debe tapar al animal con un recipiente y comunicarse con el Centro de Zoonosis municipal para que pueda ser enviado al Laboratorio de Zoonosis Urbanas para su diagnóstico”, señaló Pastorino.
También explicaron que en caso de contacto accidental, hay que concurrir al centro de salud más cercano para el tratamiento antirrábico post exposición.
“Los murciélagos insectívoros se distribuyen por toda la Provincia de Buenos Aires; no atacan al hombre o animales, pero si están enfermos o moribundos pueden morder, y ese es el momento en el que son potenciales transmisores de rabia”, informó Gustavo Martínez, jefe de Zoonosis Urbanas y coordinador de la Residencia.
Un dato a tener en cuenta es que no es habitual que estos animales se dejen ver de día, y menos en el suelo. Por lo cual, en estos casos se debe dar aviso al centro de Zoonosis para su evaluación y vigilancia epidemiológica. Es muy importante evitar el contacto de animales domésticos con murciélagos que presenten estas condiciones.
La charla incluyó la tenencia responsable de mascotas, ya que son un eslabón de la cadena de la salud pública y es importante mantener el bienestar del animal para evitar accidentes por mordeduras y prevenir la enfermedad. “Es fundamental la vacunación de perros y gatos contra la rabia, a partir de los 3 meses, una vez al año, todos los años”, indicó Martínez.
La rabia es una enfermedad infecciosa que afecta fundamentalmente al sistema nervioso. Es producida por un virus, y se transmite por mordedura, lamedura (en herida) y arañazos de animales mamíferos con rabia. Se trata de una zoonosis ya que se transmite del animal al hombre.
El Ministerio de Salud produce y distribuye, en forma gratuita, la vacuna antirrábica en toda la Provincia de Buenos Aires.