El tratamiento temprano de las artritis inflamatorias o la enfermedad reumática autoinmune sistémica puede conducir a mejores resultados para los pacientes. Sin embargo, pueden ocurrir retrasos en varios puntos a lo largo de la continuidad de la atención médica, como desde la derivación al reumatólogo hasta el inicio de un régimen de
fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad.